Cómo elegir el perfume adecuado: ¡8 consejos para encontrar la fragancia perfecta!

El perfume es un detalle invisible pero muy preciado de nuestro look, capaz de darnos carácter y personalidad y revelar algo sobre nosotros y nuestro mundo. De hecho, como un accesorio o un vestido, incluso puede revelar silenciosamente muchos más detalles de los que podemos pensar. El color y alma de su fragancia, la intensidad y predominio de notas afrutadas, florales o cítricas por ejemplo, son todas pequeñas pistas que las personas que nos rodean pueden captar, de forma más o menos consciente, llegando a identificar algún aspecto íntimo de nuestro camino. de ser.

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Por eso es importante elegir un perfume que se adapte a nosotros y a nuestra personalidad que, al igual que un vestido, nos haga sentir completamente a gusto. Pero, ¿cómo elegir el perfume adecuado? Hay pequeños consejos que pueden orientarnos en este sentido y a continuación te sugerimos algunos de ellos.

1. Déjate guiar por el instinto y lo que te gusta

Para elegir el perfume adecuado, primero se debe partir de una suposición muy simple: inspirarnos en lo que nos gusta. De hecho, no hay reglas científicas que respetar: lo que debe movernos a la hora de elegir un perfume es más bien el instinto y nuestro gusto personal.

Sin embargo, para que la elección sea más consciente y reflexiva, sería bueno tener un mínimo de conocimiento de las diversas esencias que tenemos disponibles, para tener una idea clara de aquellas que sentimos nuestras y aquellas que no. nos refleja y no nos pertenece. Por lo tanto, un pequeño glosario de perfumes puede ayudarnos a aclarar y elegir realmente la fragancia perfecta para nosotros.

2. Encuentra la esencia que amas

Identificar la familia olfativa que más nos gusta es ya un excelente primer paso para ir en la dirección correcta. A continuación se muestran algunos ejemplos de esencias: floral, afrutada, ámbar, cítrica, aromática y oriental. Estas son solo algunas de las esencias principales, cada una de las cuales tiene características bien marcadas y reconocibles: en algunas predomina la dulzura y delicadeza, en otras una nota más cálida y especiada, en otras aún sugerencias exóticas o sabores agridulces, para otras finalmente, dominar es una sensación de frescor o una nota fuerte y con carácter. Como dijimos, tú decides cuál es mejor para ti. La única forma de entenderlo es oler la fragancia y sentir que estás en el lugar indicado, aquí encontrarás una pequeña prueba, para saber qué perfume se adapta mejor a tu personalidad.

3. Aprende a reconocer las notas de un perfume.

Un perfume es como un lenguaje, que revela más sobre sí mismo: es necesario saber escucharlo. Y para hacer eso, necesitas poder entenderlo. Por eso, tras identificar las esencias principales, no podemos dejar de hablar de las notas de un perfume.

Son tres notas de las que se constituye cada perfume, una auténtica pirámide olfativa dividida en tres partes:

  • las notas de salida: se sienten inmediatamente después de rociar el perfume, y son frescas, ligeras y efímeras;
  • Notas de corazón: más voluptuosas, aparecen a los pocos minutos;
  • Notas de fondo: consistentes y profundas, hacen que el perfume perdure en el tiempo.

Solo después de una hora, cuando han aparecido los tres tipos de notas, se puede sentir el verdadero olor de un perfume.

4. Elija la fórmula correcta

Además de la esencia y notas de un perfume, también es importante elegir la fórmula adecuada. Eau de toilette, agua perfumada, eau de parfum o perfume. Los dos primeros son más delicados y dejan una estela discreta, mientras que el eau de el perfume y la fragancia son decididamente más de carácter y dejan una estela más intensa y perceptible, de nuevo déjate inspirar por tus preferencias, pero teniendo cuidado de considerar también las circunstancias y factores externos, si es necesario.

Un pequeño secreto: con un clima más cálido, es mejor no exceder la intensidad de la fragancia y elegir un perfume más delicado y ligero que sin duda será más agradable.

5. Prueba el perfume con cuidado

Pasamos ahora, después de un poco de información teórica, a cosas más prácticas. Prueba el perfume, pero intenta probarlo en las zonas donde sientes los latidos del corazón, como el cuello y la muñeca, porque al liberar más calor ayudan a intensificar la fragancia. Luego espera al menos media hora para que puedas oler el perfume en toda su esencia y con sus tres notas.

Es un tiempo razonable que te permitirá valorar con certeza si realmente te gusta, así como la intensidad y duración que tiene sobre ti.

6. Tómate el tiempo para elegir

Lo ideal sería tener un tiempo para pensar antes de proceder con la compra para conocer en profundidad el perfume que estás eligiendo.Una perfumería, usa el truco clásico de aplicar perfume en tarjetas, pero antes de pasar de una a otra, deja pasar unos segundos las fragancias y tus sentimientos al respecto.

También puede suceder que una fragancia te rapte instantáneamente; en ese caso, confía en tus instintos y elígela sin demasiadas dudas. Recuerda, tienes que sentir un toque de magia para entender que este es el aroma correcto y que un poco de puro instinto nunca está de más.

7. Aplícalo en las áreas correctas.

No te excedas en cantidad y opta por aplicarlo en las zonas adecuadas, aquellas en las que el perfume se difunde con mayor facilidad e intensidad debido al calor: el cuello, la nuca, el escote, detrás de las orejas y en las muñecas.
También puedes perfumar tu ropa para conseguir una estela ligera, pero incluso en este caso, déjate guiar por la medida.

No olvide que un perfume debe revelarse con delicadeza: dos o tres pulverizaciones son suficientes para permanecer fragante durante todo el día.

8. Guarde el perfume con cuidado

La luz, el calor, las variaciones de temperatura alteran el aroma. Así que manténgalo alejado de la humedad, en su embalaje original. Un perfume bien conservado dura de dos a cinco años. Sin embargo, cuando el perfume ya ha comenzado, la presencia de aire cambia sus propiedades y acaba por distorsionarlo. Una botella sin abrir, por otro lado, se conserva durante años: el color del perfume puede cambiar, pero esto no significa que la fragancia se arruine.

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